Seguimiento clínico y molecular nueva terapia HHT en detalle
¿Por qué usar Bazedoxifeno? El Bazedoxifeno es un SERM de última generación. En la generación anterior, está el Raloxifeno, que ha demostrado ya su acción en grupos de pacientes, disminuyendo los sangrados, a dosis de 60 mg/día[A1] . Las pacientes de HHT, postmenopáusicas, con síntomas de osteoporosis, mejoran tanto en la detención de la progresión de la osteoporosis, como en la disminución de los sangrados nasales y gástricos derivados de la HHT. La ventaja del Bazedoxifeno, es que a igualdad de eficacia que el raloxifeno, se usa a una dosis menor, 20 mg/día. Así, se disminuyen, los posibles efectos secundarios de incidencia de trombosis, que aunque mínimos, están descritos en el tratamiento con los SERM.
En el caso de demostrar en nuestro ensayo piloto, que el bazedoxifeno, es igual o superior en cuanto a los resultados terapéuticos que el raloxifeno, necesitaríamos realizar un ensayo clínico para poder comercializar oficialmente su uso, para el tratamiento de la HHT.
Según la legislación de la agencia europea del medicamento, se necesita un ensayo clínico, multicéntrico, con una población de pacientes de HHT, significativamente representativa, de todo el mundo.
Los costes mínimos derivados de un ensayo clínico, son muy elevados, del orden de un millón y medio de euros. Estos costes no serían asumibles, sin la colaboración de la empresa farmacéutica dueña de la patente. El raloxifeno, no pudo ensayarse de esta manera, porque la patente de Evista, expiró en el año 2013. Cuando la patente desaparece, se puede sustituir, el compuesto, (raloxifeno), por un genérico.
Como el bazedoxifeno es un fármaco de última generación, tiene aún patente en vigor para más de 10 años, y eso le confiere ventaja a su farmacéutica, de tener exclusividad de mercado (no se autoriza cambio a genérico). En estos casos, la empresa farmacéutica en caso de que se pueda comercializar el medicamento, tras el ensayo clínico, obtendría exenciones fiscales y otros incentivos económicos, que se aplican para el caso de los medicamentos huérfanos.
El Bazedoxifeno, se usará en este ensayo piloto, a dosis de 20 mg al día, se usará para tratar mujeres peri o postmenopáusicas diagnosticadas de HHT, con osteoporosis y sin previos episodios de tromboembolismo o datos de hipercoagulabilidad. Se tomará una muestra de sangre antes de iniciarse el tratamiento. Se anotarán las variables clínicas, previas a la iniciación de la terapia, contenido de hemoglobina y medición de los sangrados nasales usando las escalas de apropiadas. También se llevará a cabo un test de calidad de vida antes y después del tratamiento. Se recogerán muestras de sangre transcurridos 1 mes y 3 meses del inicio del tratamiento, anotándose las variables clínicas de hemoglobina, cantidad de sangrado y calidad de vida.
Se usará la población de macrófagos de las células de sangre periférica, que serán cultivados en el laboratorio durante 24 horas, para medir los niveles de expresión de Endoglina y ALK1, que son los genes afectados por mutación en HHT1 y HHT2, respectivamente, expresados por las células de las pacientes. Durante los 3 meses de tratamiento, las pacientes estarán bajo control del hospital Sierrallana/Valdecilla, especializado en HHT, y reconocido como centro de referencia por la HHT Foundation International, para ver la mejoría de los sangrados y ausencia de efectos secundarios.
Finalmente, como novedad diagnóstica/pronóstica, de cada muestra de sangre, se analizará, antes y durante el tratamiento valores de factores angiogénicos relacionados con la HHT, en concreto, VEGF (factor vascular de crecimiento endotelial), la Angiopoietina 2 y la Endoglina soluble. Según hemos publicado, estos valores se encuentran alterados en pacientes de HHT, pudiendo usarse como marcadores de la evolución de la enfermedad.